Sociedades Gastronómicas

Istingorra, la más veterana de las sociedades del Antiguo, tiene un origen similar al de tantas otras. El grupo de amigos que hacen tertulia en un bar o en el establecimiento comercial de uno de ellos, en el caso de Istingorra la carbonería de Miguel Elola, deciden buscar un mejor acomodo. Buscan por el Antiguo y les gusta un local destinado hasta entonces a la fabricación de velas de cera. Llegan a un acuerdo con el propietario sobre el precio del arriendo e inician las obras de adaptación, tras constituir una directiva que presidió Carmelo Garijo.

En la época de la fundación - año de la República - el barrio del Antiguo se iba configurando en su actual estructura urbana, siguiendo el eje marcado por la calle Matía y la Avenida de Zumalakarregi. Poco a poco, los edificios de viviendas iban sustituyendo a los pequeños talleres y depósitos de mercancías que cubrían la zona. La Sociedad Istingorra se convirtió en punto de encuentro para el vecindario.

Istingorra. Año 1978

Actualmente su actividad es fundamentalmente lúdica (como lugar de encuentro) y gastronómica, pero durante muchos años, como otras sociedades, promocionó el deporte, organizando por ejemplo el cross del día de San Sebastián. En 2005 salió por primera vez su Tamborrada.

Desde 1971, el almuerzo oficial en honor de la persona distinguida con el "Tambor de Oro", se ha celebrado en Istingorra. En el día del Patrono, por ella han pasado nombres bien conocidos, como el músico Rafael Frübeck de Burgos, Julio Caro Baroja, el pirotécnico Mario Igual, los alcaldes de las ciudades hermanadas, Alfredo Landa, Pilar Miró, Iñaki Gabilondo, Gabriel Celaya, el atleta Emil Zatopek, Luis Irizar, Antton Mercero, Alfredo Di Stefano, Elías Querejeta, José Mari Olazábal y tantos otros famosos. El menú, siempre el mismo: angulas, solomillo con pimientos y tarta. Al término de la comida, el presidente de Istingorra procedía a la imposición de la insignia de la Sociedad a cada uno de ellos.

Todas las sociedades tienen sus cuadrillas, y cada una de ellas su día de reunión con ágape. El reciente fallecimiento de Alberto Ormaetxea, entrenador de la Real Sociedad en sus años más gloriosos, nos mueve a recordar las comidas de los jueves, en Istingorra. Junto a él se sentaban sus íntimos.

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